LA PULGUITA.-
Con sus pertenencias al hombro, se desplazaba una joven pulguita
brincando de pelo en pelo de un tranquilo perro. En uno de estos saltos
apareció delante de ella una vieja y arrugada pulga, la reina de todas ellas,
la cual paró sus saltos con estas palabras
-párate aquí, ¿dónde vas joven pulga? Con tu hatillo al hombro y
con estas prisas ¿Qué te ocurre? ¿Te persigue alguien?
-No, señora reina de las pulgas, sólo es que quiero
encontrar un perro que sea más limpio que en el que ahora estoy.
-ya me dirás para qué quieres cambiar a este tranquilo animal,
aparte de su suciedad que no veo sea tan fuerte.
- quiero un perro de estos que su amo lo cuida, lo lleva a la
peluquería, donde le hacen peinados muy bonitos, que huela bien , no como
en el que estoy.
-no sabes lo que pides, te explicaré algo que me ocurrió en mi
juventud por tener tus mismos deseos y después decides lo que quieras, pero
primero escúchame
-soy todo oídos, seguro
será algo importante
- así es, verás, cuando yo era tan joven como tu, nací en un
perro que no era el sinónimo de la limpieza, no era por su culpa sino por
los dueños que tenia, pero pese a todo era un animal muy tranquilo que me
dejaba en paz, pero esto no era suficiente, quería algo más hermoso, algo más
limpio, que oliera mejor y preparé mis bártulos y como tu me fui en busca
de mi nuevo hogar, que no tardé en encontrar en un hermoso animal, bien
cuidado, limpio hasta la exageración, pensé que allí sería feliz, pero
enseguida comprendí que había cometido un error muy grande
- pero si era lo que querías dónde estaba la equivocación
-muy fácil, en sus dueños, lo lavaban cada día , con unos
jabones muy olorosos que atacaban mi olfato, llevaba un collar antiparasitario,
que aunque a mi me afectaba poco me molestaban las ondas que transmitían,
aparte cualquier movimiento que efectuara como si algo le hubiese picado,
automáticamente era llevado al veterinario para que hiciera una
exploración de su cuerpo en busca de algún elemento molesto y los viajes
a la peluquería, donde recortaban sus incipientes pelos llevándose en los
mismos muchos amigos con esto consiguieron que muchos perdieran la vida,
yo tenia que esconderme en los lugares más insospechados para no ser
encontrada, tuve mucha suerte, pero esto no era la vida que yo deseaba, por lo
cual volví a mi anterior domicilio donde disfrutaba de las delicias de poder
picar a mi amigo con deleite sin que nadie se preocupara de eliminarme y
hasta este momento soy feliz aquí
¿Crees que vale la pena
cambiar esta tranquilidad que tienes por una mejor estancia?
-pues mirado de esta manera , no creo que el cambio sea
beneficioso, por lo cual me quedaré en este lugar, aquí por lo menos
tengo el sustento asegurado y cierta tranquilidad . Gracias por tu sabio
consejo , pero ya sabes docta pulga que la juventud no tiene la experiencia que
tu posees, y a veces cuando la consiguen ya es tarde.
Magi Balsells
Derechos reservados
No hay comentarios:
Publicar un comentario